en la colina verde oscuro
mi cuerpo no deja huella
en el tuyo, y nunca lo hará.
Cuando viento y cellisca se encuentran
¿qué queda por conservar?
Así, tú y yo nos encontramos,
después, nos damos la espalda y caemos dormidos.
Como tantas noches resisten
sin luna ni estrella alguna,
resistiremos nosotros
cuando uno de los dos se haya ido lejos.
Del libro The Spice-Box of Earth
por Leonard Cohen.
1 comentario:
Aun tengo tus letras (un poco arrugadas) en círculo y en memoria.
Con música nos teníamos que conocer.
Desde aquí, te beso.
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