La obra de Nan Goldin la conocí un domingo de lecturas en mis años de librera en el FCE.
Su obra más famosa: La balada de la dependencia sexual me pasó sin mucho barullo, quizás por ser una canción de Bertolt Brecht, quizás por desconocimiento, quizás por el cliché del tema, quizás porque el color de la piel en instantáneas me provoca malestar, en fin.
Cuando llegue a: La balada desde la morgue; aunque el tema fuese el mismo la forma de madurarlo, de absorber al espectador en su mundo de historias personales, relaciones, amistades, temas de identidad me resulto revelador.
Me gusta la “Nan después de haber sido golpeada”, me gusta la mordacidad en su obra y hay varias, sí, pero una en especial donde retrata a Tilda Swinton.
Tilda Swinton |
Pero finalmente lo que más me interesa de Nan Goldin es la forma de tejer una historia a partir de otra historia registrada esa manera es infinita y siempre tentadora.
Nan Goldin |
Sonia Gadez trajo a mí esos recuerdos, a través de un artículo de una interesante revista Colombiana: El Malpensante; la cual solo la seguía por Twitter, pero también trajo consigo el interés de escribir sobre mis intereses postergados y con ello la placidez de compartirlos en este espacio blanco tejido en domingo. A la par dejo aquí, algo del trabajo fotográfico de Sonia, el cual merece observación y posterior un espacio en este blog.
Track E.